La Expedición Tahina-Can culmina con éxito su aventura en Marruecos

La Expedición Tahina-Can regresó de su aventura por el desierto y diversas ciudades de Marruecos. Un total de 46 estudiantes universitarios de toda España, acompañados de un equipo de monitores y profesores del Gabinete de Comunicación y Educación de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) formaron parte de esta expedición, que aportó, como en otras ediciones, valiosas lecciones para los viajeros.

Las medinas de Fez, las puestas de sol en una gran duna en el desierto, el Zoco de Marrakech o los pequeños poblados en zonas desérticas fueron los escenarios donde la expedición con nombre de estrella se aproximó a una realidad desconocida y apasionante. Para ello, entrevistaron a obreros, artesanos y guías del desierto, entre otros.

Las ciudades de Marruecos mostraron a los expedicionarios de Tahina-Can nuevas lecciones, a través del reconocimiento del modo de vida de una cultura diferente. Sin embargo,  los viajeros destacaron los paisajes naturales como una de las vivencias más intensas del viaje. La excursión a la Garganta del Todra y las jornadas en el desierto constituyeron una experiencia singular, que los expedicionarios vivieron en toda su intensidad. Vestidos con chilabas, comieron junto a un oasis y esperaron el amanecer en el desierto al calor de haimas, entre gente amigable y acogedora.

Durante nueve días, Tahina-Can viajó por los paisajes de Marruecos, en coches 4x4, dromedarios o autobús.

La expedicionaria Sonia Prado, estudiante de 3er año de Periodismo de la UAB, afirmó que "Tahina-Can es otra realidad, otra forma de ver las pequeñas cosas, de prestar atención a esos detalles que no deben pasar desapercibidos".

Lluís Muñoz, estudiante de 3er año de Comunicación Audiovisual en la misma universidad, valoró también la experiencia: "Perder la noción del tiempo, tener la sensación de estar soñando o sentirse insultantemente feliz son algunos de los elementos clave que dotan a nuestra estrella grande de esa magia especial y única. Viajar implica muchas connotaciones que tan solo he logrado encontrar en Tahina-Can".

Para Sofía Prats, estudiante de Bellas Artes en la Universidad de Valencia "Tahina-Can Marruecos ha sobrepasado los límites del desierto personal en el que vivimos cada uno; nos ha guiado por entre los laberínticos callejones árabes que nos separaban de aquellas culturas tan distintas y similares a la nuestra".

La Expedición Tahina-Can es una iniciativa del Gabinete de Comunicación y Educación destinada a fomentar el interés de la comunidad universitaria por la cultura y las costumbres de otras regiones y establecer lazos estrechos de cooperación entre los universitarios españoles y los estudiantes, instituciones y medios de comunicación de otros países. La edición de este año cambió su recorrido tradicionalmente latinoamericanoy eligió Marruecos como destino.

Los diarios de viaje de Tahina-Can (enlaces en esta misma página) muestran algunas de las experiencias que vivieron los expedicionarios.