Un viaje en busca del Che
¿Dónde estás Guevara? Magia, aventura y leyendas en la isla de Cuba de Santiago Tejedor es una búsqueda convertida en viaje. O mejor, un viaje en busca de una persona. Ésta es la historia de alguien que tomó un avión y cruzó un océano para encontrar a alguien, para aprender de alguien, para viajar con alguien: Ernesto Guevara de la Serna, el Che.
El libro se presentará el día 16 de octubre a las 18.30h en el Aula Magna de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Autónoma de Barcelona, con la actuación en directo del cantautor Diego Domingo.
En esta "búsqueda" hablan cinco guerrilleros, humildes y nobles, que conocieron en persona al Che. Y a los que todavía hoy se les quiebra la voz y se les humedecen los ojos al recordarlo: Oscar Fernández Mell (Médico de la Columna 8 "Ciro Redondo". Hizo la Invasión y participó en la campaña de Las Villas. Gran amigo de Ernesto Guevara. Estuvo a su lado en el Congo); César Alba (Se incorporó a la "Columna 4" comandada por el Che en la Sierra Maestra. Participó en la Invasión y en la campaña militar de Las Villas cuyo punto culminante fue la batalla de Santa Clara); Manuel Ramos Peña, "El Curro"; Ramon Ilarte Garrido; y Miguel Enrique Rivero Soa, "Manzanillo", todos ellos combatientes que lucharon a las órdenes del argentino.
El autor conversó también con Maria del Carmen Ariet, Coordinadora científica del Centro de Estudios Che Guevara, que durante cerca de seis años "removió" el suelo boliviano en busca de los restos del "guerrero" hasta, por fin, encontrarlos. También habló con decenas, quizás centenares, de ciudadanos cubanos que nacieron cuando Guevara ya llevaba muchos años asesinado y escondido bajo la tierra seca de un destartalado y polvoriento aeropuerto boliviano.
En sus páginas, se habla de estrellas, de muchos tipos y de "una" en particular. Hay algo de soledad. También de poesía. Bastante de viajes. Y, por descontado, mucho de un tal Ernesto Che Guevara. Se habla del guerrillero, del estadista, del político, del revolucionario, del ministro, del teórico... Y más, mucho más, del marido, del padre, del soñador, del poeta, del que escribía agazapado apoyado en el tronco de un árbol en la espesura de la Sierra Maestra, el Congo o Bolivia... También de un joven Guevara que, sin saberlo, nos enseñó a viajar de una forma única y diferente por su "mayúscula América".
Más información: g.comunicacio.educacio@uab.cat